Enroscada en la ribera de tu pelo
el viento me porfía.
Subyace mi sed de líquenes.
(Mi espasmo de rémora
te susurra al oído
una clara metamorfosis
sobre el entusiasmo)
12 de julio de 2008
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Mecidos al compás de sus reflejos, apostaban por la comodidad de un tejido adosado a la humedad de sus fisuras
1 comentario:
.
(sin reparos para el entusiasmo, la contorsión del gesto electriza nuestras manos y las chispas tienen forma de palabras bañadas por el agua de la boca. no podemos sino sobrevivir)
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