En la madrugada
te escribo como saltitos de agua
que nos rompen en pedazos
ciegamente contra el mundo;
esa maraña de letras y gestos
inventada por los cuerpos
para reposar violentamente
en la tela del amanecer.
Llevas un antifaz
y un cuerpo morado en la mano derecha.
Cierto.
Las aletas son sólo un boceto
como excusa ante las vacilaciones del nado.
19 de agosto de 2008
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1 comentario:
si en la madrugada bocetaramos el día... qué sería del día?
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